La quiropráctica tiene un excelente historial de seguridad y está ampliamente reconocida como una terapia eficaz, no invasiva y sin fármacos para el tratamiento del dolor de cabeza, el dolor de cuello, el dolor de espalda y muchos problemas relacionados con la columna vertebral. La mayoría de los pacientes experimentan alivio tras un ajuste.
Preguntas frecuentes sobre la atención quiropráctica
Un quiropráctico puede saber si su dolor se debe a vértebras desalineadas y realinear la columna a su posición correcta. El especialista utiliza sus manos para aplicar una suave presión en la región afectada con el fin de corregir el problema subyacente para restaurar o mejorar la función articular, lo que proporciona alivio del dolor. Con una presión suave y controlada de las manos, el especialista puede corregir la subluxación (vértebras desalineadas) y aliviar el dolor.
La manipulación o ajuste quiropráctico es un procedimiento muy controlado que sólo implica una fuerza mínima y una presión suave. Rara vez causa molestias. La mayoría de los pacientes sienten alivio inmediatamente después del tratamiento.