Inyección de cortisona para el dolor de rodilla
Hay muchas razones por las que puede sufrir dolor de rodilla. Si persiste, una de las opciones de tratamiento es una inyección de cortisona. Este tipo de inyección también se realiza en otras zonas del cuerpo, siempre en articulaciones, como el hombro, la muñeca, la columna vertebral, la cadera, el codo, el tobillo o incluso articulaciones más pequeñas de los pies y las manos. Antes de ponerte una inyección de cortisona para el dolor de rodilla, hay algunas cosas esenciales que debes saber.
¿Qué contiene la inyección de cortisona?
Aunque puede variar, la mayoría de las inyecciones de cortisona tendrán dos componentes principales. Un corticoesteroide o un medicamento similar proporcionará a tu rodilla un alivio del dolor a largo plazo, pero ese alivio no empieza de forma instantánea. La mayoría de las inyecciones también incluyen un anestésico local para proporcionar un alivio instantáneo, al menos durante un tiempo.
Causas de dolor de rodilla que pueden requerir inyecciones
Como ya se ha mencionado, el dolor de rodilla puede producirse por varios motivos. Las inyecciones de cortisona para el dolor de rodilla se utilizan habitualmente para tratar la artritis, incluida la reactiva, la psoriásica, la reumatoide, las lesiones de rodilla por uso excesivo, las lesiones relacionadas con el trabajo y la artrosis. También pueden ayudar a tratar la tendinitis, la gota y la bursitis.
En el caso de la artritis, los médicos sólo suelen sugerir inyecciones de cortisona si hay tres o menos articulaciones gravemente afectadas. Es poco probable que tu médico te ponga inyecciones para más articulaciones a la vez y probablemente te sugiera otro tratamiento.
¿Puede cualquier persona recibir una inyección de cortisona para el dolor de rodilla?
Tanto los niños como los adultos pueden recibir inyecciones de cortisona para aliviar el dolor de rodilla. Sin embargo, hay algunas situaciones en las que no se debe poner la inyección o en las que el médico puede sugerir esperar.
Si tiene alguna alergia a los ingredientes de la inyección, no podrá ponérsela con seguridad. Su médico también puede sugerirle que evite la hidrocortisona y algunas otras inyecciones de cortisona si tiene antecedentes familiares de depresión maníaca o depresión. Si se ha vacunado recientemente, tiene una infección, está embarazada o ha estado potencialmente en contacto con el sarampión, la varicela o el herpes zóster, tendrá que esperar para recibir la inyección.
Qué esperar de una inyección de cortisona
Los resultados tras una inyección de cortisona varían de una persona a otra. Algunas personas pueden no experimentar ningún alivio. La mayoría experimentará un aumento de la inflamación y del dolor durante los dos días siguientes a la inyección. En ese momento, tanto la inflamación como el dolor deberían empezar a disminuir, y es posible que disfrute de ese alivio durante meses. Es habitual que el alivio del dolor dure entre seis y doce semanas.
Procedimiento para la inyección de cortisona
Su médico limpiará la zona antes de administrarle la inyección de cortisona. La fluoroscopia, que es un tipo de radiografía o ecografía, ayudará a guiar la aguja. Sólo sentirá un poco de presión cuando el médico introduzca la aguja. No debe sentir molestias importantes.
Después de que le pongan la inyección, es probable que tenga que permanecer en la consulta del médico durante al menos media hora para vigilar cualquier efecto secundario. También se trata de una medida de seguridad, ya que los efectos adormecedores de la anestesia local dificultarán la marcha.
Los próximos días
En los días siguientes a la inyección de cortisona, se le pedirá que se lo tome con calma. Evite estar de pie, ya que no querrá forzar la zona. Lo mejor es que evite también los jacuzzis y las bañeras, pero puede ducharse sin problemas. Si el dolor de rodilla reaparece a los pocos días de la inyección, utilice hielo en lugar de calor.
Efectos secundarios frecuentes
Los efectos secundarios más frecuentes son hinchazón y dolor en el lugar de la inyección, que desaparecerán en unos días. También es posible que aparezcan hematomas en la rodilla, que también deberían desaparecer en varios días.
¿Con qué frecuencia pueden administrarse inyecciones de cortisona?
Una cosa crucial que hay que saber es que no se pueden poner inyecciones de cortisona con demasiada frecuencia. Según las recomendaciones de la Clínica Mayo, las inyecciones no deben administrarse más de tres o cuatro veces al año ni en periodos inferiores a seis semanas.
El otro factor que hay que tener en cuenta es que las inyecciones de cortisona pueden perder eficacia cuando se utilizan con más frecuencia, y suelen ser más eficaces la primera vez.
Posibles efectos secundarios
El uso limitado de las inyecciones de cortisona se debe a los riesgos que conllevan, sobre todo porque aumentan cuantas más inyecciones se reciban y cuanto mayor sea la dosis de medicamento incluida en ellas. Las dosis típicas de hidrocortisona, una inyección de cortisona habitual, oscilan entre 5 y 50 miligramos.
Ya hemos mencionado los efectos secundarios más comunes. Algunos efectos secundarios menos comunes pueden incluir infección de las articulaciones, daño a los cartílagos, muerte de huesos cercanos, daño a los nervios, osteoporosis, debilitamiento de los tendones, cambio del color de la piel por la inyección, adelgazamiento de la piel por la inyección, y/o aumento temporal del azúcar en sangre, rubor facial, o aumento de la inflamación y el dolor por la inyección. También es posible que las inyecciones de hidrocortisona debiliten su sistema inmunitario, aumentando el riesgo de infecciones.
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Fuentes adicionales:
https://www.mayoclinic.org/tests-procedures/cortisone-shots/about/pac-20384794
https://www.webmd.com/osteoarthritis/features/injections-for-osteoarthritis-pain